POEMAS DE ISABEL MIRALLES
La siesta. De Joaquín Sorolla
Pobre amor
¿Fue sincero el decir de su verbo?
El grito de sus deseos hacían temblar hasta los recovecos más íntimos.
¿Eran verdad sus palabras al amparo de la luna?
Sólo eran un capricho, un juego ante la soledad de su día a día, sin libertad.
¿Por qué exigía amor a cambio de nada?
El miedo le ató a sus raíces, en el fondo, simple cobardía.
Absurda pasión la que se engalana con mentiras de miel.
Pobre amor, siempre esclavo de sus fantasías.
Isabel Miralles 1-junio-2013
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